¿Quién Soy?
Soy Mariana González Vicencio, tengo 27 años y he vivido toda mi vida en Pedro Aguirre Cerda, en la población Dávila. Soy Historiadora, especializada en Historia de las Infancias vulneradas, profesora de historia, manicurista, feminista y pansexual.
Si bien he vivido toda mi vida en P.A.C, mi educación básica la cursé en la comuna de San Miguel y la media en Providencia, en el Carmela Carvajal, por el incentivo de mis padres. Sin embargo, no por ello he sido ajena a la realidad de la verdadera educación municipal. En el Carmela, desde que entré, participé abiertamente en todas las movilizaciones de la Revolución Pingüina, porque creía, y creo, que no deberían existir unos cuantos colegios privilegiados y otros abandonados por el sistema. La educación impartida debería ser de la misma calidad aquí, en las poblaciones y arriba, en Las Condes.
Al salir del colegio entré a estudiar Licenciatura en Historia en la UDP, la cual se especializa, entre otros elementos, en los estudios de género. Allí conocí y me enamoré de la Historia de las infancias y decidí especializarme en ello, a pesar de que ésta es un área de estudio relativamente nueva en el país. Tras ello, estudié un Magister en Historia en la UNAB, pues era la universidad que más cercanía tenía con mi tema de especialización. Me encontraba realizando mi tesis, sobre las infancias vulneradas de principios del siglo XX, con enfoque de género, hasta que tuve que suspenderla por la pandemia (perdí el acceso a las fuentes de investigación).
Además estudie pedagogía en Historia, porque una de mis vocaciones es enseñar, sin embargo, como me he dedicado durante años a la investigación histórica, he estado más tiempo trabajando en universidades que en colegios. De manera paralela soy manicurista, por un lado, para dejar fluir mi lado artístico, por otro, porque es muy dificil vivir de la historia en este país y no siempre hay oportunidades laborales.
En cuanto a trayectoria política, nunca he sido parte de algún partido ni he destacado en alguna organización. Mi participación previa a estas elecciones se centró en los movimientos sociales, como una persona más dentro de las manifestaciones. Durante el estallido social formé parte de la comisión de niñes en la asamblea de mi población. Nos encargamos de darles un espacio de contención, educación y entretenimiento en tiempos de revolución. Además de ello, participé como estudiante durante toda la Revolución Pingüina y sus diversos tipos de manifestaciones.
Decidí postularme a constituyente porque creo que ésta es una instancia de la que tod@s debemos formar parte, no podemos dejar que los mismos de siempre escriban la nueva constitución. Por lo mismo, como una persona más, decidí dar la pelea para asegurarme de que nuestras necesidades, las de las personas comunes del distrito, sean escuchadas. Sobre todo las de las mujeres, disidencias y niñes, que han sido olvidadas a nivel constitucional a lo largo de toda la historia de Chile.
En cuanto a lo personal, soy una persona muy curiosa, siempre dispuesta a aprender nuevos conocimientos y habilidades. De hecho, aprendí a hacer páginas webs para poder hacer este sitio. Mis momentos libres suelo usarlos para practicar nuevas técnicas de nail art y aprender cosas nuevas, pero también me gusta relajarme viendo series y jugando videojuegos con mi polola.
Soy pansexual, el género no es relevante para mi al momento de fijarme en una persona (si quieres aprender un poco más de este término, puedes hacerlo en la sección "Educativo"). Vivo con mi polola y la gran mayoría de mis amistades son parte del espectro LGBTIQ+, de quienes aprendo constantemente con respecto a sus formas de relacionarse y expresarse ante el mundo.
De quién también he aprendido mucho durante casi toda mi vida es de mi hermano menor, quien está dentro del Espectro Autista. Gracias a él aprendí desde temprana edad la importancia de la no discriminación, porque independiente de nuestras características y diversidades, tod@s somos personas que merecemos el mismo respeto y oportunidades. Lamentablemente esto no se cumple en la sociedad actual, pero estoy dispuesta a dar la pelea hasta el final para conseguir un Chile más equitativo y menos discriminador.
Como pueden ver, soy una persona como cualquier otra, he vivido las desigualdades del sistema actual en carne propia, pero confío en que juntes podemos crear un país más justo. Precisamente por ello quiero representarles a todes en la nueva constitución. Porque si no estamos todes, si no está el pueblo que ha luchado por décadas por una vida digna, considerando su gran diversidad y sus necesidades, nada de esto tendrá sentido.
